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miércoles, 19 de junio de 2013

Miercoles de dibujo Vol.3, "EL LUX"

En esta sesión, miercoles de dibujo sale de las 4 paredes y de improvisado vamos a la gran re-apertura del "teatro lux" ahora mas bien... "centro cultural lux" o algo así...

El evento fue una gran fiesta con meseros, boquitas, dj en vivo, fotos, peliculas, luces de discoteca y un puñado de gente siendo (o aparentando ser) ellos mismos. pero yo decidí verlo desde el punto de vista de la edificación, que en sus inicios impactó y modificó tanto la cultura de nuestra ciudad y que ahora con... 77 años de vida, reúne de nuevo a tanta gente, a ver cual es el efecto que tendrá esta vez.


Lux de antaño. foto de skycrapercity.com
foto de: skycrapercity.com


Aquí este articulo publicado por Byron Quiñonez en el diario siglo 21 el día 09 de junio del presente año, donde describe y explica porqué este edificio fue un hito en la cultura de nuestra ciudad capitalina. 

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El cine Lux renace como un ave fénix

 Desde su fundación en 1936, el cine Lux fue un agente de las nuevas tendencias culturales, empezando por su diseño Art Deco. En su época de esplendor dejó huella en la mente de los guatemaltecos y decayó en los años 90 con el auge de las películas en VHS. Ahora, a los 77 años de su creación, renace como Centro Cultural.

Uno de los edificios más emblemáticos del Centro Histórico de Guatemala, el Teatro Lux, ayudó a modificar las percepciones culturales de la población guatemalteca por medio de la proyección de imágenes que, poco a poco, influyeron en la cultura popular. Antes de su fundación, la mentalidad y cultura de Guatemala seguían dictados casi coloniales e incluso provincianos, no solo en el aspecto arquitectónico de sus edificios (el de Correos, el Palacio Nacional y el de la Policía, por ejemplo), sino hasta en el consumo, ya que la gente le daba preferencia a los productos nacionales sobre los de fabricación extranjera.

“Lo primero a tomar en cuenta es que la primera película que impactó al público guatemalteco fue Allá en el Rancho Grande, de Tito Guízar, una de las primeras en presentarse en el cine Lux”, relata el doctor en historia del arte Fernando Urquizú, quien añade que las primeras películas francesas y europeas que vinieron a Guatemala se exhibieron en un salón de belleza a la vuelta de la iglesia del Carmen, en la 8a. avenida y 10a. calle. En aquellos años, la tecnología cinematográfica estaba apenas iniciando y dichas exhibiciones constaban meramente de cuadros en movimiento y representaban, más que películas elaboradas, meras tomas de la vida cotidiana. Luego, en el pasaje Aycinena empezaron a realizarse las primeras funciones de cine que impactaron a la sociedad.

“Aparecieron salas como la del hotel La Unión, frente al Mercado Central”, recuerda Urquizú.

“Luego aparecieron las primeras salas de proyección y el cine dio un salto cualitativo y cuantitativo, con películas de cine mudo. Estos cines tenían una antesala donde la gente convivía, comía enchiladas y se escuchaba música de marimba en vivo, lo que facilitaba la convivencia social”, explica el historiador.

Posteriormente, en 1936, aparece en escena el Teatro Lux, un proyecto ambicioso y moderno desde el mismísimo diseño al estilo art decó, muy norteamericano y cosmopolita. El edificio fue construido en 1935 por los arquitectos alemanes Roberto Hoeff y Rodolfo Bader. La estructura se compone de concreto armado, hierro forjado, paneles de mármol y vidrio celosía. Estaba diseñado para alojar a 2,051 personas y de inmediato se convirtió en el teatro de más abolengo, tanto, que a los hombres no les era permitido ingresar sin traje formal ni a las mujeres sin abrigo.

Antes de su inauguración ya existían teatros como el Abril, el Europeo, el Colón y el Variedades, pero estos debieron ceder espacio cuando surgieron nuevas y enormes salas de proyección: el Palace, el Cápitol y el más elegante de todos, el Lux, que destacaba por su ubicacion de esquina y su diseño curvilíneo, elegante y sobrio. Eran los tiempos del presidente Jorge Ubico.

La modernidad vino gracias al cine

Quizá el sobrenombre de Séptimo Arte se deba a que la cinematografía fue, además de arte en sí, un vehículo para romper esquemas culturales e instaurar nuevos. “El estilo moderno, cosmopolita, sirve para materializar la Guatemala moderna, y el símbolo de la década del 30 era el cine Lux. En Latinoamérica no se lograban vender los productos manufacturados norteamericanos, por cuestiones tradicionalistas: era más famosa la cusha que los licores embotellados y las aguas carbonatadas, y la gente prefería consumir cigarros de tusa, que eran los más buscados”, recalca Urquizú al explicar el proceso de penetración cultural en Guatemala por medio del cine, así como el nacimiento de un nuevo modelo de consumo en la sociedad guatemalteca.

“La cinematografía norteamericana empezó a incursionar en nuestro país por medio del cine mexicano. El cine Lux se abre como El palacio del Cine, por ser una construcción monumental con sentido moderno. Charles Chaplin y Valentino eran los modelos norteamericanos, pero por cuestiones idiomáticas se programó cinematografía en español y música de tríos y marimba”, recuerda.

El nuevo arte cinematográfico impulsó la modernidad en el país y expuso a los guatemaltecos a nuevas formas de vida y modas sobre las viejas tradiciones. “El Lux desdobló la moda estirada francesa y exhibió películas mexicanas, que tienen que ver mucho con la idiosincrasia del pueblo guatemalteco. Acá van apareciendo personajes que van permeando en el ideario, como Elvis y Frank Sinatra, así como Pedro Infante, que tenía mucho que ver con la cultura hispánica, con películas como Nosotros los pobres”, relata el historiador.

Un escenario de la cultura nacional

Durante su existencia, el Lux ha sido testigo y escenario de toda clase de actividades culturales. Como teatro, durante las décadas de 1930 y 1940, era el sitio donde se daban cita todos los estratos sociales del país. Y aunque ahí se vivió la época de esplendor del cine mexicano y las  historias unificaban a la gente, los precios de ingreso los separaban: el público pudiente ocupaba la luneta, las clases medias llenaban el palco, y la galería estaba reservada para la gente de menores ingresos.

Durante los años 40, antes de proyectar la película anunciada en cartelera se acostumbraba exhibir documentales, por lo general alemanes, con mensajes de propaganda ideológica. Eran los ecos de la Segunda Guerra Mundial que llegaban al país.

Desde 1946 hasta 1979, las veladas de la Huelga de Dolores de la Universidad de San Carlos de Guatemala se llevaron a cabo en el cine Lux, donde se montaron varias obras del poeta y dramaturgo Manuel José Arce.


El Lux se mantuvo vigente como gran sala de cine hasta la década de 1970, cuando el público  empieza a crecer y hay más diversidad en cuanto a salas de cine. A causa del conflicto armado interno empiezan a haber manifestaciones en el Centro Histórico, e incluso bombas incendiarias y de propaganda. En consecuencia, las familias de los grupos de poder abandonan el centro de la ciudad y se trasladan a los suburbios, a colonias recién fundadas como Molino de las Flores, el área circundante a la avenida La Reforma y Miraflores. El centro empezó a ser considerado como peligroso y el sector es poblado entonces por gente de menor condición económica.

“El terror urbano y la inseguridad hicieron que decayera el esplendor del cine Lux y el Centro Histórico en general, y la gente de todos los estratos ya no se congregaba en lugares cerrados”, recapitula Urquizú. El Lux, según el historiador, empezó a decaer con el advenimiento de las películas en VHS, la televisión por cable y la renta de películas, que alejaron al público de las salas de cine.


RECUADRO:

Nueva sede del Centro Cultural de España (CCE)


El edificio fue remodelado para adaptarse a los tiempos modernos y participar del renacimiento del Centro Histórico. Al frente funciona un restaurante Saúl E. Méndez. El primer piso tiene una galería de arte y la sala de teatro está pendiente de remodelación. En el 2o. y 3er. nivel funciona la nueva sede del Centro Cultural de España en Guatemala.

Yanira Gálvez, coordinadora de actividades del CCE, explica: “Nos unimos al proyecto de rehabilitación de edificios patrimoniales y se trató de mantener la estructura original. Las remodelaciones incluyen una plataforma de concreto donde se ubican las tres salas de exposiciones. Se buscó dejar el color original de concreto y conjugarlo con lo contemporáneo.
Restauración del edificio y renacimiento cultural

“La Municipalidad nos presentó el proyecto del Paseo de la Sexta y eso nos dio la inquietud de restaurar el espacio”, relata Patricia Rosenberg, directora cultural del espacio. “En los 80 se hizo la primera remodelación, cuando se dividió en 5 salas y se cerraron los balcones, y así funcionó hasta principios de los años 2000, cuando la piratería afectó la asistencia”.

El arquitecto Alejandro Paz relata que la restauración fue un desafío. “Lo encontramos descuidado y con varias capas de etapas de construcción efectuadas a través de los años, cada una respondiendo a una etapa diferente de su historia. Poco se podía percibir de la arquitectura original, aunque existían suficientes indicios para entender su configuración original”.

“Tratamos de conservar todo lo original, como el vestíbulo, las butacas y las columnas de mármol negro”, explica Rosenberg. “Me pidieron realizar un plan maestro para darle vida de nuevo, y mi propuesta fue darle una variedad de funciones para dinamizar su uso actual. Dejamos de cine teatro el primer nivel, introdujimos un café, y un centro cultural en el segundo y tercer nivel.  Posteriormente, el Centro Cultural de España (CCE) se interesa por el proyecto y decide tomar el 2o. y 3er. niveles”, relata Paz, y añade que se buscó generar nuevas funciones para un edificio antiguo, diversificar su público y el alma del edificio.

“Buscamos respetar el estilo actual en las zonas en donde se leyera el estilo original, mientras que utilizamos un lenguaje contemporáneo donde la función no tuviera un vínculo con el tema original del edificio”, explica.

“Hace ya un año que el edificio funciona como espacio para propuestas artísticas: talleres, conferencias, teatro, música y películas. En un futuro queremos tener una agenda de cine independiente y documental. La sala ya está completamente remodelada, solo falta lo técnico, el equipo audiovisual y las luces”, concluye Patricia Rosenberg.


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En fin, vamos a lo que venimos. la re-apertura en el presente.













Las instalaciones:

Fachada Este, sobre la 6a avenida. Foto: miercolesdexpresión
Fachada Este, sobre la 6a avenida. Foto: miercolesdexpresión
Esquina 6a avenida y 11 calle. Foto de: Iván Castro Guatemala, prestada de su cuenta de Flickr.
Esquina 6a avenida y 11 calle. Foto de: Iván Castro Guatemala, prestada de su cuenta de Flickr.
Sala de teatro, aún en construccion. Foto: miercolesdexpresión
Sala de teatro, aún en construccion. Foto: miercolesdexpresión
Sala de cine en funcionamiento. Foto: miercolesdexpresión
Sala de cine en funcionamiento. Foto: miercolesdexpresión
Graderio. Foto: miercolesdexpresión
Graderio. Foto: miercolesdexpresión
Ascensores, bonito trabajo con plywood. Foto: miercolesdexpresión
Ascensores, bonito trabajo con plywood. Foto: miercolesdexpresión


 
Biblioteca del CEC. Foto: miercolesdexpresión
Biblioteca del CEC. Foto: miercolesdexpresión


Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión



Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión


La Gente:

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Que Florezca el Arte!. Foto: miercolesdexpresión
Que Florezca el Arte!. Foto: miercolesdexpresión

Mirar el mundo con otros ojos y seguir mirando. Foto: miercolesdexpresión
Mirar el mundo con otros ojos y seguir mirando. Foto: miercolesdexpresión


Cada quien con su pena! Foto: miercolesdexpresión
Cada quien con su pena! Foto: miercolesdexpresión

El mundo patas arriba. Foto: miercolesdexpresión
El mundo patas arriba. Foto: miercolesdexpresión


Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión


La fiesta:

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión


El Arte:

en esta ocasión, inauguraron el espacio de exposiciones con una muestra de arte contemporaneo. con decenas o quizá un centenar de expositores profesionales o amateurs de diferentes ramas del arte. escultura, pintura, dibujo, instalación, audiovisual y quien sabe que mas.

aqui algunas (no todas) de las obras que pudimos observar


Foto: miercolesdexpresión
Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión


Foto: miercolesdexpresión

Foto: miercolesdexpresión


NOTA: todas las obras son propiedad intelectual de sus respectivos autores. aclaro...


para cerrar. 

Me pareció muy interesante el resultado de la iniciativa de las personas e instituciones involucradas en el proyecto, el cual se pudo observar esa noche: 

Un Amplísimo espectro artístico, con obras tan variadas e invitando a los artistas nuevos, emergentes ó amateur; a presentar codo a codo con artistas de renombre. 

La gran variedad de personas asistentes, de todos los colores, tamaños, estratos, ideologias y profesiones. todos juntos en un ambiente que se hace neutral a través de la cultura y el arte.

En general, a traves de la historia del LUX podemos ver que nunca ha sido excluyente. siempre ha sido para todos. y esperamos que siga del mismo modo.

(que largo quedó este post...)

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